MujeR contra MujeR

miércoles, agosto 22, 2007

Mirando el mundo detrás de los cristales

Encerrada en mi mundo lleno de dolor, de silencio, de preguntas inútiles sin respuesta alguna, de soledad y tristeza… un día decidí salir; ¡sí!, pero… ¿salir a dónde, a quién buscar, a quién contarle lo sucedido?...

De pronto vi la luz… ¡sí!!!… sería ella, la fiel amiga de la adolescencia, la que jamás le negó a mis lágrimas su hombro, la que siempre comprendió los dobleces de la vida, la que escuchó por largas horas todas mis complicadas, simples, grandiosas o absurdas confidencias.

No dudé en llamarla y acordar una cita…

Llegué con muchos nervios, sabía que no me juzgaría; pero otra parte de mí temía… y ante la duda, mejor desenmascararla. Así que, cargada de “valor”, empecé la confesión…

Yo: Sé que has escuchado muchas cosas, que las has callado y aguardado este momento. Sé que tu presencia silenciosa en el funeral era más que un grito, más que un abrazo, más que tus cálidas manos dándome palmaditas en la espalda… y te lo agradezco. Sé que has hecho caso omiso de los comentarios (la gente siempre comenta… y cuando el río suena, piedras trae)… pero debo decir…
Amiga: Sí "C", ya lo sé y no tienes que lastimarte por decirlo…

Sólo me dio un fuerte abrazo… el abrazo cálido y sincero que había dejado esperar por largo tiempo.

Amiga: Como otras veces, "C", no voy a juzgarte; sólo quiero que te cuides y seas feliz. Me sigo preguntando porqué Dios permite que pasen tantas cosas en tu vida… Tú debes encontrar la respuesta.
Yo: La amé, "S",… la amé como a nadie en la vida, tuve su vida en mis manos, tuve su muerte en mis brazos y sus ojos sin luz, clavados en los míos, gritando “Te Amo”, “Te espero… allá en el cielo poblado de estrellas, en un mundo donde nos amaremos sin las ataduras de la carne ni el prejuicio del mundo y de su gente…”. Yo la amé… aún la amo, y por ella supe lo que es el amor a plenitud, lo que significa amar hasta morir y más allá de la muerte… Como dice la canción… “Si los muertos aman, aún en la tumba yo he de amarte”.
Amiga: No dudo que viviste un intenso amor; pero ahora tu vida debe continuar…

... Y continuó…

Pero me tocó aprender cosas, hasta entonces, totalmente desconocidas…

1. “Lugar de ambiente”, “salir del clóset”, “activa”, pasiva”, versátil”… ¿qué eran todos estos nombres??? Si en mi mundo todo había sido ¡tan diferente!. Yo sólo amé a una mujer y ya!!!... sin tantos apelativos y sin tantos miedos. <<<>>>… y punto!!!... el resto venía sobrando y no lo necesitábamos, al menos no en el mundo nuestro.
Para mí, mi forma de ser, de amar, de “sentir”, sólo había sido una cuestión única y puramente de SENTIMIENTOS…, de amor…, de gusto…, de pasión. No nació de una necesidad de enfocar afectos, ni en fijaciones de padre o madre dominante. Nació del alma, del sentir; era aquella emisión interna y fuerte que producía en mí la admiración hacia una mujer, en concreto «P», que me cautivó, me enamoró, me subyugó y a quien convertí en mi mundo y mi razón; ¡¡¡por eso simplemente!!!…: por ser MUJER y porque LA AMÉ y LA AMO!!!. No me busqué a mí misma en ella; la acepté diferente de mí, sin que sea mi complemento, sólo para entregarle mi amor, mi pasión. Me gustó porque era MUJER, porque podía conmover mi alma. Más allá de los estereotipos de feminidad, encontré su esencia, su ser…; ese encanto que la hizo… para mí… única en el universo, maravillosa y encantadora.

Y seguí escuchando: “eso es de lesbianas”, “no salió del clóset”, “huele a ambiente”... ¿lesbianas, clóset?, ¿ambiente?... ¡tantos sobrenombres!!!! para un solo sentimiento... mi mundo era simple y sin reglas... no existía clóset ni lesbianas... podía amar a una mujer sin la etiqueta de lesbiana... (aunque no me molesta), sin gastar en un clóset y sin ir a ningún lugar de ambiente, porque nunca hizo falta.

2. Las relaciones lésbicas son siempre muy difíciles… no pueden ser “públicas” y tal vez por ello existe engaño, traición, infidelidad… Alguien me dijo una vez… “si a una mujer le duele tanto la traición del hombre que ama, cuánto más le duele la traición de la mujer que se ama”… ¡Vaya!... de allí de donde procede tan “sabia” filosofía, llegó la cara de la verdad y la experiencia… Esta mujer que amé, con quien me di la “segunda oportunidad” en mi mundo les, fue quien se encargó de ponerme los cuernos mientras juraba amarme. ¿Con qué se pasa esto??? Y yo, que hasta entonces, no sabía de traición, tuve que tragar mil lágrimas en otras mil noches de desvelo. Supe, así, que como ELLA««->P<-»»… ¡ninguna otra!!!


Pero seguiré caminando con mis ventanas entreabiertas, con los cristales limpios y el corazón en pleno vuelo mirando todas las ventanas que cuelan por la mía.

Mientras siga teniendo ventanas,
y las pueda abrir o cerrar,
dejar que entre aire fresco,
gotas de lluvia,
voces lejanas,
mientras mire gente caminando,
y sienta que puedo salir,
gozar de la falta de encierros,
me mantengo permeable,
flexible,
viva.

1 comentario:

Anónimo dijo...

es terriblemente bello encontrar el amor... y aunque algun dia se lo lleve la vida, o la muerte, es parte de tu vida... un abrazo a la distancia y desde el otro universo... y una reverencia a la valentia de querer elegir...